El número de víctimas mortales de la violencia doméstica íntima –concepto que incluye los casos de violencia en el ámbito de la pareja o expareja siempre que no se trate de la acción ejercida por un hombre contra una mujer- fue de 25 entre los años 2016 y 2018, dos más que en el trienio anterior. Solo en tres de esos casos se habían presentado denuncias previas.